Ayer abrieron las sucursales locales de los Bancos Nación y Provincia. Se establecieron acciones para evitar la aglomeración de clientes. Se colocaron asientos en las veredas, con la coordinación de policías y agentes municipales.
En nuestra ciudad, la reapertura de las entidades bancarias fue exclusivamente para el pago de haberes jubilatorios, pensiones y asignación universal por hijo, fue muy distinta al caos que se observó en las grandes poblaciones.
Desde horas tempranas, el Municipio colocó en el exterior de ambas sucursales locales, dos filas de sillas, debidamente separadas, donde los usuarios, a medida que iban llegando tomaban asiento, para luego ser llamados a partir de las 10 horas, para ingresar al interior del banco, de 1 a 2 personas. Personal de Seguridad coordinó el paso de los clientes, que se armaron de paciencia para aguardar ser llamados. Las condiciones del tiempo acompañaron, con una mañana que fue de fresca a cálida. Pasado el mediodía, se observó escasa presencia de personas. Hoy y mañana se reiterará el operativo de acceso controlado.

En nuestra ciudad – a diferencia de otros lugares, donde la gente comenzó a hacer la espera anticipada, ya en la medianoche del jueves-, los usuarios se acercaron en su gran mayoría poco después de las 9 horas, para aguardar la apertura de las entidades. En tanto en forma paralela, había otros usuarios que formaban fila para poder acceder a los cajeros automáticos, donde se encontraba personal municipal realizando tareas de desinfección de los dispositivos y aplicaban alcohol en gel sobre las manos de las personas que accedían a retirar dinero.