«Hay alguna cuestión que no cierra en esta situación. La gente no está bien», respondió el Obispo Hugo Manuel Salaberry, al ser consultado sobre las dificultades que atraviesan los ciudadanos en muchos lugares del país.
Si bien omitió referirse a un partido político u otro, en declaraciones a Canal 2 Noticias, durante su paso por Rauch el pasado sábado, expresó que «evidentemente no están pudiendo dar con la tecla como para dar un paso al crecimiento del país. Desde mi lugar trato de ayudar a la gente, vivir como familia. Has visto lo que cuesta mantener la familia unida y en ese sentido no hay que admitir más disensos».
En relación a la figura del Papa Francisco y su desempeño, expresó que «está al tanto de todo, eso es indudable, pero que haya bajado línea política, no lo ha hecho con nadie, ni con nosotros. Hablar de la situación política nacional, si, como otros temas del ámbito internacional, como los propios problemas de la Iglesia, si los habla. Los obispos argentinos estuvimos dos horas con él, y fue donde nos dijo «este es el tiempo que tiene para criticar al Papa, y pregunten lo que quieran saber. Fue un ida y vuelta con su claridad habitual para expresarse en todos los temas».
Con preocupación expresó que «hay una inequidad en la distribución de bienes que es patética. Así no podemos pensar un país» y volcando su mirada sobre esta región, la cual abarca la Diócesis de Azul», planteó que «vemos que está todo bastante quieto. Los jóvenes se siguen yendo, emigran a buscar mejores oportunidades. Salvo Tandil y Olavarría, las demás ciudades tienen muchas dificultades, sobre todo con los flujos económicos, más acotados, con un costo alto de vida, que afecta a la movilización de las familias».
Haciendo hincapié en el proceso electoral que estamos atravesando, renegó ante la falta de acuerdo y consensos. «En lugar de ser años de acuerdos, parece que son tiempos de mayores divisiones. Eso no pude ser. En tiempos difíciles debería ser mayor acuerdo, pero parece que nuestra sociología es así».
Ante esta cuestión, sostuvo que «ahí si ingresa fuertemente la fe, pidiendo ser buenos cristianos. Ama al prójimo como a mí mismo, es una ley excluyente. Si quieres amar a Dios, debes amar al prójimo. Esas coordenadas no pueden dejarse de lado para quienes pretendemos tener un país mejor. Tenemos que alcanzar el consenso en todos los ámbitos y el problema parte de la esencia de estar muy encima de vos mismo, que puede haber otro que tiene ideas de mayor valoración que las tuyas, entonces eso lo pido como gracia, en este día especial para esta comunidad, que tanto quiero. Debemos caminar juntos como familia».