El siniestro fue el martes por la noche, aunque horas después se reavivó el fuego y quedó dañada en su totalidad. Se inició una campaña solidaria para juntar elementos destinados a la familia damnificada, que fueron entregados esta mañana.
Una vivienda situada en un predio rural, en cercanías a la Estación Colman fue destruida por el fuego luego de un incendio registrado la noche del martes. Si bien los bomberos pudieron controlar el foco, el fuego se reanimó el miércoles y terminó provocando daños casi totales.
Según indicaron voceros del caso, el incendio afectó el martes por la noche el techo de la finca, al parecer por el uso de una estufa a leña, aunque los bomberos pudieron controlar el hecho. Fue alrededor de las 22, y en el interior habitaba un matrimonio y una beba de alrededor de tres meses. Por el hecho no hubo heridos.
Sin embargo, el fuego se reanimó el miércoles por la mañana, y los daños fueron casi totales. Cerca de las 8 horas, el foco se reanimó en la vivienda de barro, revestida con ladrillo y con techo de paja, y lo que quedaba de la casa, como todo lo que había en su interior, fue devorado por las llamas.
La casa afectada se encuentra en un predio denominado «La Lidia», situado a 50 kilómetros de Rauch, entre las localidades de Miranda y Colman.
Rápidamente, desde la propia comisión de Bomberos se inició una campaña a fin de dar asistencia a los damnificados. En ese sentido se informó sobre la necesidad de poder reunir elementos de la vivienda. Ya se recibieron en el Cuartel ropas para la familia, sillas, mesas, colchones y ropa de cama, entre otros elementos que había solicitado la familia damnificada. En ese sentido la campaña fue exitosa, por cierto, y esta mañana partieron 3 camionetas desde el cuartel con diversos elementos hacia el campo de Colman.
Héctor Vaqueiro, segundo jefe del Cuartel, en declaraciones a este Diario, agradeció el apoyo de la comunidad, que rápidamente acercó las donaciones. En relación al siniestro detalló que al parecer el caño de una salamandra ocasionó el fuego en el cielorraso, que si bien fue extinguido el martes por la noche, se reavivó el miércoles por la mañana y derivó en la destrucción total del inmueble.
La familia en forma momentánea se trasladó a otra vivienda cercana, dentro del mismo predio rural, hasta determinar si se levantará una nueva casa.
