Esta mañana el Intendente Municipal, encabezó el breve acto que organizó el Municipio en el Monolito ubicado en avenida San Martín, Perón y Belgrano. Los festejos se vieron reducidos a la mínima expresión debido a la emergencia sanitaria por el Coronavirus.
Se conmemoró este lunes el 148º aniversario de la Fundación del Pueblo de Rauch. Por tal motivo, en un hecho sin precedentes, se llevó a cabo un homenaje a los fundadores, con la colocación de una ofrenda floral al pie del monolito del centenario, en la intersección de las avenidas San Martín, Perón y Belgrano. Fue atípica la ceremonia, ya que no más de 20 personas se hicieron presentes, en el marco del aislamiento social obligatorio que nos impone la cuarentena, donde no se pueden hacer actos de carácter masivos.
A las 10 horas, el Intendente Municipal Maximiliano Suescun, unos pocos funcionarios, representantes del Concejo Deliberante, encabezados por el Presidente Gustavo Palazzo y los Presidente de los bloques Lucrecia Herrería de Juntos por el Cambio y María Lamarche del Frente de Todos, de las fuerzas de seguridad y salud, realizaron el acto, que a pesar de su brevedad, fue significativo para todos los que estuvieron en el lugar.
El Padre Lisandro Vítola realizó la invocación religiosa. Seguidamente, la Enfermera Graciela Atucha, la Oficial de Policía Tamara Pereyra y el Agente de Tránsito Diego Villalba, colocaron la ofrenda floral. Ellos representan a las fuerzas vivas de Seguridad y Salud, que en este momento están siendo protagonistas en el control sanitario y social, para que Rauch siga libre de la pandemia del Coronavirus.
El único orador del acto fue el Intendente Suescun, quien dijo que «es un momento que quedará para la historia, totalmente distinto», agregando que la fecha «nos encuentra distanciados físicamente, pero estamos convencidos que nos encuentra más unidos que nunca desde lo humano, lo afectivo, la solidaridad».
Más adelante, destacó que «me siento orgulloso de cada uno de los vecinos de Rauch. Cada uno de los rauchenses es excepcional. Cuando pasan estas cosas sin precedentes, se pone en marcha la fuerza de los rauchenses, de tender la mano y de ayudar un vecino a otro. Cuando más adversa es la situación, sacamos lo mejor de sí».
«Rauch es un puño apretado, un entramado social más fuerte que nunca. Las instituciones están al servicio, los vecinos atentos y dispuestos a tender su mano. Tenemos el apoyo de toda la clase política. Todos manejamos una misma dirección, queremos sacar a Rauch adelante», dijo.
«La ofrenda floral fue significar a todos los que nos cuidan. Cada uno de nosotros estamos dejando lo mejor, para sacar esta situación. Haciendo lo que hay que hacer, es una contribución enorme», manifestó Suescun, en la última parte del discurso. A su terminó se produjo el retiro de la única bandera de ceremonias que acompañó el acto, la de Bomberos Voluntarios y la desconcentración de los presentes.