El intendente Maximiliano Suescun estuvo observando los trabajos este viernes por la mañana, viviendo con expectativa el desarrollo de dicha obra. «Era un día esperado, vamos a andar muy bien», indicó el Mandatario Comunal.
Comenzó la última etapa del asfalto en frío, en la calle Victoriano Montes. Luego de todas las instancias previas para preparar el tramo de 100 metros, en la mañana de este viernes, operarios de la Secretaría de Obras y Servicios Públicos comenzaron con la colocación del mencionado asfalto. Fueron varias las instancias de preparación previa y consolidado de la calle que se realizaron, para llegar a este día.
El intendente Municipal Maximiliano Suescun estuvo observando las obras, acompañado por el Secretario de Obras y Servicios Públicos Ricardo Pizzorno. Junto a ellos se encontraban en plena tarea los operarios y la maquinaria afectada a la obra.
Suescun, en diálogo con Prensa Municipal, se mostró muy satisfecho por el inicio de esta nueva etapa, indicando que «era un día esperado».
«Fuimos de a poco para llegar a esto. Nos equipamos en la planta, compramos las herramientas de manos que necesitamos, preparando al personal» afirmó, para luego agregar «creo que vamos a andar muy bien. Para Rauch es novedoso».
Más adelante, manifestó que «la financiación de esta obra se hace con el Fondo de Infraestructura Municipal y el PREINBA (que fue votado por la Legislatura nacional, que derivó 5 mil millones a los Municipios)».
El Intendente resaltó la tarea que hacen los agentes municipales, indicando que «asfalto negro nunca habían hecho. Sí hormigón, obras de gas, agua, luz. De todo tipo de cosas, pero faltaba esto».
Para finalizar, expresó que «este tipo de obras te dan independencia, pudiendo hacer las cuadras que sean necesarias. Volcando los recursos de la contribución del mejorado del asfalto en Rauch, se podrá ir avanzando. A lo largo de los meses y los años, Rauch quedará asfaltado. Da la posibilidad de no quedar atado a una gran obra. Una empresa de asfalto caliente, si no tener una obra de 30 a 40 cuadras, ni se mueven para venir».
